Pero... eres mi padre (Prólogo, Capítulo 1,2 y 3)
Prólogo - ¡Ahhhhhhhhhh!, ¡Partera, por favor haz tu mejor esfuerzo! Esto es una tortura. Es una obvia tortura. Este momento, que deberia ser un momento de alegria absoluta para alguien, se ha convertido en una tortura, tanto para mi como para ella, quien esta mas allá de la puerta de la habitación. De pie con la espalda contra la pared del pasillo, cerré los ojos con fuerza ante sus agudos gritos que afligían mis oídos, luego los abrí de nuevo y mire a mi alrededor. -Toda la familia, incluidos sus padres, el abuelo, el tío, la tía estaban aquí, incluso mi padre, quien siempre estaba tan ocupado que era difícil verlo una vez al mes, esperaban con impaciencia el nacimiento de mi hijo. En particular, mi suegro y su padre eran los que parecían más ansiosos, y él se sentó en una silla, sacudiendo las piernas como si estuviera nervioso. - … Pobre cosa. -A los 19 años, mi abuelo me palmeó el hombro con su gruesa mano como si sintiera lástima por su nieto, quien primero...